Gestionar distintos tipos y fuentes de información de diversas tipologías (papel, digital, imágenes o audios), ubicados en reservorios de datos no estructurados, sin una lógica de tratamiento inteligente y sin convergencia.

Integrar la información, mediante un proceso de transformación digital, para estructurar la información no estructurada, a través de un proceso cognitivo de datos.

• Aplicar la transformación digital.
• Optimizar la búsqueda y organización de documentos, mediante criterios de identificación, según su tipología (cláusulas, fechas, vencimientos, etc.).
• Mitigar el nivel de error mediante tareas manuales y artesanales.
• Una eficaz gestión de alertas, de acuerdo a las características del negocio.
• Dotar de mecanismos de inteligencia artificial a los procesos de datos.